Parte de la "oficina agraria virtual". El sistema está pensado para accederse desde internet. Incluso los veterinarios oficiales utilizarían la oav.
Pero claro, no todo el mundo tiene internet. En el campo menos, por cuestiones de precio, accesibilidad y edad. Así que se puede utilizar el teléfono para llamar a una operadora que hará el trabajo por nosotros.
El ganadero tendría crotales (pendientes de plástico) en su casa. Cuando naciese el ternero, podría los crotales él mismo, haría la anotación de los datos en el libro de registro de la explotación, llamaría por teléfono y le diría a la operadora qué número de crotal le puso al animal, qué dia nació, el sexo, la raza, y el crotal de la madre.
La xunta imprimiría el documento y daría de alta el animal en la base de datos.
El documento se envía por correo al ganadero.
El problema para el productor reside en que en muchas zonas rurales el correo es muy lento. Pero mucho. Para los productores de leche esto puede ser problemático: ellos necesitan vender muy jóvenes a los animales.
Si quieres ver el manual de la oficina, pincha aquí.
Otro problema es cubrir el libro de registro. Las casillas de los libros no se ajustan exactamente a la legislación, y muchos productores tienen problemas para cubrirlo correctamente.
También se verán en dificultades en las ferias y mataderos: la identificación de la raza hecha por un lego, suele dejar que desear. No va a coincidir la documentación con el animal.
Los mataderos sufren especialmente el problema de las identificaciones incorrectas: Documentos que no coinciden con los pendientes, pendientes distintos en cada oreja (ambos pendientes deben tener el mismo número), falta de concordancia entre el animal que vemos y el que describe la documentación, etc. Actualmente casi todas las incidencias provienen de animales traidos de fuera de galicia, que pese a ser una minoría producen muchos más incidentes que los animales que pasan por el sistema actual de la Xunta.
